“El Señor se transfiguró para anunciar la resurrección y nos pide a nosotros que también seamos ahora reflejo de esa transfiguración en el mundo en el que vivimos, testigos del Evangelio que creemos y que predicamos”, lo dijo Monseñor Mario del Valle Moronta Rodríguez, Obispo de San Cristóbal y Primer Vicepresidente de la Conferencia Episcopal de Venezuela (CEV), explicando las celebraciones en honor al Santo Cristo de La Grita, que este 6 de agosto, Fiesta de la Transfiguración del Señor, celebra 412 años de devoción y tradiciones en tierras venezolanas.
Una devoción diocesana y nacional
El Obispo de San Cristóbal señaló que, las celebraciones en honor a la milagrosa imagen del Santo Cristo de La Grita, se ha venido preparando a través de diversas actividades no solamente en La Grita, sino en toda la Diócesis, porque este es un Santuario Diocesano.
“Desde el domingo pasado –afirmó monseñor Moronta– se ha intensificado la presencia de peregrinos. Después de 2 años en que no pudimos hacer nada debido a la pandemia, pues, mucha gente está retornando. Y hoy –5 de agosto– concretamente tenemos tres actividades: una de ellas es la Eucaristía que se celebra cada día; una jornada, por la tarde, para bendecir a todos los niños y las mamás que están embarazadas; y luego tendremos una serenata al Santo Cristo, que es una velada cultural y religiosa para prepararnos”. Y a partir de las doce de la noche hasta las 8 de la mañana del día 6 de agosto, celebran diversas Eucaristías porque llega mucha gente caminando.
Monseñor Moronta también señaló que se espera mucha asistencia de fieles y peregrinos. “Calculamos que entren los que ya han venido y los que vendrán este fin de semana, se calculan unas quinientas mil personas, más o menos, que acuden a la peregrinación. También hemos tenido algunos encuentros de oración, tanto aquí como en todas las parroquias, para preparar esta jornada tan importante. Para muchos que no podrán venir, será transmitida por Televisión, por streaming, por radio, y por las redes sociales”.
El mensaje del “rostro sereno” del Cristo de La Grita
El Primer Vicepresidente de la CEV explicó que, la imagen del Santo Cristo de La Grita, es conocida también como la imagen del “rostro sereno”, porque es la imagen del Dios crucificado, Dios-hombre crucificado, que está como diciendo: “todo está cumplido”, y por eso el rostro lleva una gran serenidad.
En este sentido, Monseñor Moronta dijo que ese rostro nos quiere decir dos cosas en este tiempo. “Una de ellas es que, todos nosotros los creyentes, discípulos de Jesús, debemos ser fiel reflejo del rostro sereno, ser testigos de la acción redentora, liberadora, pascual de Jesús, en medio de esta Venezuela que sufre. En segundo lugar, lo estamos percibiendo con lo que piden los peregrinos, ‘fuerza, salud y paz’ para poder enfrentar las diversas problemáticas que estamos teniendo en Venezuela”.
Fieles acuden a venerar la imagen del Santo Cristo de los milagros en los Andes venezolanos
No a la resignación fatalista, sino el compromiso evangelizador
“En el país – precisó el Obispo de San Cristóbal – tenemos muchos problemas en el orden de lo económico, de lo social, mucho migrante. Entonces, la gente viene a buscar no una resignación. Es interesante el planteamiento que nos propone la gente, no habla de resignación sino de búsqueda de fuerza, de fortaleza, de serenidad para utilizar la palabra del himno del Santo Cristo de La Grita a fin de poder realizar no solo la obra social, sino la edificación del Reino de Dios. Por eso, también a lo largo de la preparación manejamos un lenguaje eminentemente evangelizador. Nosotros no vemos la resignación fatalista, sino el compromiso social, el compromiso cultural, el compromiso religioso y evangelizador a fin de que podamos dar los pasos necesarios para ir recuperando la Venezuela que todos queremos”.
Los desafíos que Venezuela enfrenta hoy
En su condición de Vicepresidente de la CEV, Monseñor Moronta indicó que Venezuela hoy en día enfrenta tres grandes desafíos desde el punto vista social y otros desde el punto de vista evangelizador.
“Primero, la recuperación del país. Nosotros los Obispos del país hablábamos de la refundación de la Nación, no en el sentido de un maquillaje de las estructuras, sino que verdaderamente volvamos a sentir y experimentar la necesidad de hacer valer los principios fundamentales de la democracia, del compromiso social en medio de todo. En segundo lugar, un reto que se ha ido fortaleciendo afortunadamente es el de la solidaridad entre los que más tienen y los que menos tienen, e incluso una solidaridad que solemos llamar un poco familiarmente, horizontal, de tal manera de que los mismos pobres se ayuden entre sí, para no solamente compartir lo poco que tengan o lo mucho que puedan tener, sino, sobre todo, para reafirmar la necesidad de estar unidos. Y el tercer gran reto, sobre todo, este es mensaje que estamos dando los Obispos continuamente y no solo los Obispos, los laicos, también los sacerdotes, en sus diversas expresiones es la convocatoria a la unidad de todos los venezolanos, dejando a un lado las mezquindades, dejando a un lado todo lo que sea de carácter particular, que piensen en el bien común”.
Y desde el punto de vista de la evangelización –afirma monseñor Mario Moronta_, pues hemos seguido las indicaciones del Papa Francisco, una Iglesia en salida, una Iglesia que sale al encuentro, una Iglesia que camina con su pueblo, ahí está el concepto de sinodalidad, no reducimos la sinodalidad solo a encuentros como algunos quizás lo suelen hacer, sino tomando la palabra, “sínodos”, qué significa caminar juntos. Pues, es el gran desafío de la Iglesia, salir, salir al encuentro de los demás para crear la cultura del encuentro, de la escucha y del discernimiento, como nos ha pedido el Santo Padre.
Cofradía del Santo Cristo custodia la imagen venerada del “Rostro Sereno”
La trata de personas y el comercio de órganos
Monseñor Mario Moronta también se refirió a una problemática que viene afectando al país desde hace algún tiempo, es decir, el problema de la trata de personas y el comercio de órganos, sobre todo, en la frontera.
“Es una denuncia que venimos haciendo desde hace mucho tiempo, pero el problema de los migrantes sigue, son considerados como mercancía y existe la presencia ahora de una nueva modalidad que se llama la ‘modalidad de los coyotes’, son aquellas personas que están tratando de pasar gente para llevarlos vía Panamá a Centroamérica, Estados Unidos, y les cobran altísimas cuotas de participación y muchas veces los dejan después abandonados”.
A esto se une también el que captan, sobre todo, adolescentes tanto varones como niñas, muchachas adolescentes, para llevarlos a la prostitución, incluso fuera del ámbito de la frontera, están incluso en las islas del Caribe. Y también se ha detectado que hay grupos que pretenden robar niños y también jóvenes, sobre todo, jóvenes que tienen una contextura deportiva, para luego quitarles los órganos y venderlos al mejor postor. Ya incluso las autoridades nacionales hace algunos meses han captado alguna de estas personas y ha habido algunas detenciones.
En honor del Cristo de La Grita celebran la Fiesta de la Transfiguración del Señor.
Un trabajo mancomunado entre Colombia y Venezuela
Es un problema, una dificultad y un espectro que está allí, frente al cual también nosotros no solamente denunciamos, sino que ofrecemos la ayuda a través de Cáritas. Lo interesante –señala Moronta- es que estamos trabajando en conjunción con las diócesis de Colombia, no es un problema de Venezuela, no es un problema de Colombia, sino que es una situación que estamos enfrentando mancomunadamente respetando nuestra autonomía, pero estamos buscando ese sentido de comunión poniendo en práctica lo que el Papa nos dijo hace dos o tres años atrás, que la Iglesia no tiene fronteras porque es madre de todos. Eso es un poco el trabajo que estamos haciendo de protección, de alimentación, de asesoramiento, de acompañamiento, sin embargo, hay muchas personas que son engañadas y que siguen cayendo en las manos de estas mafias.
La fiesta de la Transfiguración del Señor
Finalmente, en la solemnidad de la Transfiguración del Señor, Monseñor Mario Moronta envió un mensaje a los oyentes de Vatican News: “El mensaje es muy claro porque el Señor se transfiguró para anunciar la resurrección y nos pide a nosotros que también seamos ahora reflejo de esa transfiguración en el mundo en el que vivimos y visto desde la perspectiva de la celebración que estamos realizando aquí en el Táchira, el Cristo del ‘rostro sereno’ que comparte con nosotros nuestras alegrías, nuestras tristezas, que seamos también reflejo decidido de ese Cristo, pero como un testimonio permita en el encuentro, en la salida hacia los demás pues hacerme consecuencia del Evangelio que creemos y que predicamos. Un gran saludo, mi agradecimiento y que Dios nos siga bendiciendo a todos”.
Peregrinación del clero de la Diócesis de San Cristóbal al Santuario del Santo Cristo.