Los medios de comunicación informa que un sacerdote de una comunidad cristiana, no católica, tras haber sido secuestrado fue asesinado en Camerún. Se trata del padre Olivier Ntsa Ebode, encontrado muerto el 1 de marzo en Obala, perteneciente al municipio del departamento de Lékié, en la región central de Camerún.
Según la prensa local, un grupo de hombres se presentaron en su domicilio la noche del 28 de febrero alegando que un familiar suyo se encontraba mal y necesitaba sus servicios religiosos. El sacerdote aceptó subir con ellos a un coche para ir al lugar. Por el camino, lo asesinaron y arrojaron el cuerpo fuera del vehículo.
El cadáver del sacerdote fue encontrado de madrugada y trasladado al tanatorio de Obala.
El anuncio de su muerte ha causado gran consternación también entre los fieles de la Iglesia católica y la comunidad local, donde el padre Olivier era conocido por su compromiso en favor de la paz y la justicia social.